El policarbonato es un material muy resistente a los impactos. Fue desarrollado en la década de 1970 para aplicaciones aeroespaciales, incluidas viseras de cascos de astronautas y parabrisas de naves espaciales, así que al menos, eso es genial...
En la década de 1980, el policarbonato se utilizaba para lentes porque era más delgado, más liviano y más resistente a los impactos que el vidrio. Hoy en día es el estándar para gafas de seguridad, gafas infantiles y gafas deportivas, debido a su excelente resistencia al impacto.
El policarbonato es un termoplástico que inicia el proceso de fabricación de lentes en forma de gránulos a los que se les da forma en un proceso llamado moldeo por inyección. Durante este proceso, los gránulos se comprimen bajo una presión muy alta en moldes de lentes y luego se enfrían para formar una lente de plástico duro.
Además de su resistencia, las lentes de policarbonato bloquean naturalmente el 100% de los rayos UV del sol sin necesidad de recubrimiento, lo que significa que sus ojos están adecuadamente protegidos. Estos lentes también se ofrecen en una gama más amplia de opciones (como lentes progresivos) que otros materiales de lentes de alto impacto.
Si bien el policarbonato sin duda es una lente verdaderamente resistente a los impactos, su durabilidad tiene un precio. El policarbonato tiene un reflejo de lente significativamente mayor que el plástico o el vidrio, lo que significa que podría ser necesario un revestimiento antirreflectante. Además, el policarbonato tiene un valor Abbe de sólo 30, lo que significa que ofrece una calidad óptica comparablemente pobre a las opciones discutidas anteriormente.
Si tiene más de 40 años y tiene dificultades para ver de cerca y al alcance de la mano, es probable que tenga presbicia. Las lentes progresivas son nuestra mejor solución para la presbicia, brindándote una visión nítida a cualquier distancia.
Al igual que las lentes bifocales, las lentes multifocales progresivas permiten al usuario ver claramente a diferentes distancias a través de una sola lente. Una lente progresiva cambia gradualmente la potencia desde la parte superior de la lente hacia la parte inferior, brindando una transición suave de la visión de lejos a la visión intermedia/por computadora y a la visión de cerca/lectura.
A diferencia de los bifocales, los lentes multifocales progresivos no tienen líneas ni segmentos distintos y tienen la ventaja de ofrecer una visión clara en un amplio rango de distancias, sin limitarlo a dos o tres distancias. Esto los convierte en una opción popular para muchas personas.
Aunque una lente progresiva le permite ver claramente de lejos y de cerca, estas lentes no son la opción correcta para todos.
Algunas personas nunca se adaptan a usar lentes progresivos. Si esto le sucede, puede experimentar mareos constantes, problemas con la percepción de profundidad y distorsión periférica.
La única forma de saber si las lentes progresivas funcionarán para usted es probarlas y ver cómo se adaptan sus ojos. Si no se adapta después de dos semanas, es posible que su optometrista deba ajustar la intensidad de su lente. Si los problemas continúan, una lente bifocal podría ser mejor para usted.